Resulta preocupante leer estos días que todavía un porcentaje muy elevado de autónomos no dispone de conexión a internet. No es que este hecho sea un factor crítico para la marcha de un negocio pero, qué duda cabe, tiene consecuencias.
En primer lugar el no estar conectado no significa necesariamente la no presencia de un negocio en internet. Afortunadamente existen fórmulas de publicitación muy profesionales y efectivas que no exigen obligatoriamente una interacción por parte del publicitado, aunque esta siempre es recomendable. Es el caso del directorio de empresas CODIGO34.
Por otro lado podríamos decir que no disponer de una conexión a internet nos condena a desconocer información esencial para la buena marcha de nuestro negocio. Entre otras cosas limita nuestro conocimiento de la competencia, e imposibilita disponer de un canal efectivo de interacción con nuestros clientes y proveedores.
El fortalecimiento de marca y la salvaguarda de nuestra reputación es otro factor a considerar, ya que la “escucha” activa de conversaciones en la red acerca de nuestro negocio posibilita una reacción adecuada a solicitudes, y dudas o comentarios (sean estos positivos o negativos).
Aunque un asesoramiento profesional siempre es recomendable, un empresario debe vigilar aspectos básicos de su negocio personalmente, y hoy en día internet se revela como uno de los medios más eficaces para hacerlo.
