La UE, en una decisión “aparentemente” antimonopolio, votó hace unos días contra el modelo de negocio digital impuesto por Google, aduciendo las “actividades comerciales a partir de su dominio en las búsquedas en la red”.
En primer lugar, queremos dejar claro que nuestra opinión no depende de que tengamos más trabajo gracias a Google.
Sí, cuando hacemos proyectos de posicionamiento web es casi siempre posicionamiento en Google porque supone más del 90% del mercado español. Pero si no fuera así no pasaría nada. Si, por ejemplo, tuviera una mayor cuota de mercado Bing, trabajaríamos en función de este buscador. O del que fuera.
Dicho esto, desde o10media queremos mostrarnos en contra de esta medida, puesto que nos parece ridícula.
Efectivamente, Google es el culpable de su dominio, pero lo es porque ha hecho el mejor producto. Y a la UE se le ha olvidado un punto importante a este respecto. El buscador de Google no es un servicio público, es un producto de la propia compañía.
El problema de todo esto es que el usuario lo tiene bien fácil. Utilizar otro buscador. De hecho, la competencia en Internet es feroz.
Fijémonos en un hecho curioso.
¿Cuántas veces, y tras haber realizado una descarga -legal o ilegal- nos ha cambiado en el navegador el buscador predeterminado? A buen seguro que muchas veces.
¿Qué es lo que hacemos posteriormente? O ir a las opciones del navegador para cambiar esta acción que no hemos autorizado o buscar “google” en ese buscador para ir al motor de búsqueda que realmente queremos utilizar.
¿Qué queremos mostrar con esto? Que Google no nos obliga a utilizar su servicio. Somos nosotros los que, por las razones que sean, preferimos utilizar este buscador y ellos, conscientes de ello, lo monetizan. Es así de sencillo.
Por todo esto, pensamos que los eurodiputados no sólo no han acertado en su propuesta, sino que además denotan muy poco conocimiento sobre como las nuevas tecnologías están cambiando los modelos de negocio.
En este sentido, la UE tendría que atacar con más ahínco otros aspectos del negocio digital, como por ejemplo la fiscalización de sus ingresos. Pero ahí no está sólo involucrado Google.
De hecho, no sólo están involucradas empresas 100% tecnológicas…